Es tiempo de regreso a las aulas de la mayoría de los estudiantes del país, y con ello vuelven a vivirse situaciones de riesgo para los niños. Cesvi Argentina te guía para que el viaje a la escuela sea seguro.

Vuelta a clases segura

Como cada comienzo de ciclo lectivo, millones de niños en el país irán a la escuela. Muchos de ellos en vehículos particulares y otros en transporte público. Asimismo, existe un gran porcentaje que se traslada al colegio en micros escolares o combis dedicadas exclusivamente a esta actividad.

Los padres delegan una enorme responsabilidad al depositar la seguridad de sus hijos en manos ajenas. Confianza ciega, ya que un gran número de estos vehículos no cuentan con los requisitos de seguridad indispensables, no tienen permiso legal para realizar esta actividad o sus choferes no poseen la capacitación o habilidades idóneas.

Pero esta irresponsabilidad no se circunscribe solo a los transportes escolares, también es usual ver a padres con autos en condiciones lamentables, con más pasajeros de lo permitido, sin cinturones de seguridad o sin los sistemas de retención infantil, entre otros elementos de seguridad que resguardan la vida de los niños.

Ante este reiterado panorama, Cesvi Argentina sugiere:

Para los vehículos particulares:

  • • Respetar la cantidad de plazas del auto. No excederse ya que cada asiento tiene asignado su propio cinturón de seguridad.
  • Los menores de 10 años deben viajar siempre en el asiento trasero.
  • Tener en cuenta los sistemas de retención infantil y su funcionamiento. Estos se dividen en grupos de acuerdo al peso del infante:

Grupo I: hasta los 18 kg.

Grupo II: con amoldador con respaldo para niños con pesos entre 18 a 25 kg.

Grupo III: para pesos de hasta 36 kg.

  • No estacionar en doble fila ya que se expone a situaciones de riesgo al hacer cruzar a los chicos por lugares incorrectos. Se debe estacionar adecuadamente sin importar el tiempo que eso lleve. Hay que tenerlo en cuenta con antelación.
  • Los chicos no deben cruzar la calle solos. Siempre de la mano de un adulto, respetando los semáforos y sus respectivas sendas peatonales.

Recomendaciones para el transporte escolar:

  • • Verificar que la unidad esté habilitada. En la página del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (www.buenosaires.gov.ar) hay un listado con los vehículos autorizados,
    sus respectivos dominios, números de habilitación, vencimiento de habilitación y la verificación técnica. En la parte trasera, el vehículo debe contar con el número de habilitación correspondiente y con elementos retrorreflectivos que lo hagan notar.
  • La leyenda «TRANSPORTE ESCOLAR» debe figurar en los cuatro lados. Poseer dos puertas laterales de ascenso y descenso, cuyas aperturas no sean accesibles para los más chicos. Además, tiene que llevar un matafuego y un botiquín de primeros auxilios.
  • En el micro, además del conductor profesional (con licencia habilitante para el transporte público de pasajeros), debe haber un coordinador que se encargará de cuidar a los pasajero.
  • El conductor del micro debe estacionar siempre en la puerta del colegio y cerca del cordón para que los chicos desciendan directamente en la vereda.
  • Los pasajeros deben utilizar el cinturón de seguridad durante todo el trayecto. Es necesario que el coordinador controle este punto

Un mismo problema, distintos controles

Para comparar los diversos criterios que se utilizan en el país para legislar el transporte escolar, elegimos cinco puntos: Rosario, Córdoba, Mendoza, Ciudad Autónoma de Buenos Aires y San Isidro, un distrito de la provincia de Buenos Aires.

De este contraste surge una gran disparidad de criterios. Por ejemplo, en CABA y San Isidro exigen que el chofer tenga un ayudante, para controlar que los pasajeros se encuentren en sus respectivos asientos con el cinturón de seguridad colocado, mientras que en el resto de las ciudades analizadas, no. Otro punto destacado es que únicamente Rosario reglamentó el apoyacabezas para cada una de las butacas.

Sin dudas un aspecto polémico es la obligación de contar con sistemas de retención infantil, algo que demanda la Ley de Tránsito y que tan solo San Isidro y la CABA piden como requisito para permitir el accionar de los transportes escolares.

Antigüedad de los micros

En el límite de antigüedad que pueden tener los micros escolares también hay diferencias en los distintos puntos del país.

  • CABA: Hasta 12 años para vehículos ingresantes y hasta 20 años para vehículos existentes.
  • Córdoba: Menor a 10 años.
  • Mendoza:  Menor a 15 años.
  • Rosario: Hasta 20 años.
  • San Isidro: Hasta 25 años.

Sin dudas en muchos distritos se emplea como transporte escolar al ómnibus que se utilizó para transportar pasajeros y por su antigüedad ya no puede realizar esa labor y se destinan a llevar niños a la escuela.

Cuidados para particulares

Las irresponsabilidades no se circunscriben solo a los transportes escolares, también es usual ver padres con autos en condiciones lamentables, con más pasajeros de lo permitido, sin cinturones de seguridad o sin los sistemas de retención infantil, entre otros elementos de seguridad que resguardan la vida de los niños. Por ello, recomendamos lo siguiente:

  • Respetar la cantidad de plazas del auto. No excederse ya que cada asiento tiene asignado su propio cinturón de seguridad
  • Los menores de 10 años deben viajar siempre en el asiento trasero.
  • Tener en cuenta los sistemas de retención infantil y su funcionamiento. Estos se dividen en grupos de acuerdo al peso del infante:

Grupo I: hasta los 18 kg.

Grupo II: con amoldador con respaldo para niños con pesos entre 18 a 25 kg.

Grupo III: para pesos de hasta 36 kg.

  • No estacionar en doble fila ya que se expone a situaciones de riesgo al hacer cruzar a los chicos por lugares incorrectos. Se debe estacionar adecuadamente sin importar el tiempo que eso lleve. Hay que tenerlo en cuenta con antelación
  • Los chicos no deben cruzar la calle solos. Siempre de la mano de un adulto, respetando los semáforos y sus respectivas sendas peatonales.