Ford Argentina llevó a cabo el Foro Futuro de la Movilidad, un ciclo de conferencias que reunió a 12 especialistas en movilidad, tecnología e innovación del ámbito local e internacional. El evento, que tuvo lugar el 14 de Noviembre en el campus del IAE Business School, abordó desde distintas perspectivas la problemática de la movilidad en grandes ciudades.

El enfoque de Ford en materia de movilidad contempla la colaboración global entre industrias, gobiernos, ámbito académico y ciudadanos para generar soluciones que hagan evolucionar la movilidad personal.

A medida que las industrias continúan convergiendo, el intercambio de ideas, perspectivas y desafíos resulta de gran importancia para asegurar la movilidad personal para millones de personas en el mundo, para lo cual el desarrollo innovador de tecnologías e infraestructuras es fundamental.

Con el fin de profundizar estos aspectos, Pablo Bereciartúa (Director del Instituto Tecnológico de Buenos Aires), Eduardo Gorchs (Director Mobility Argentina de Siemens) y José Luis Romanutti (Gerente General del Centro de Diseño de Software de Intel), desplegaron sus argumentos acerca de por qué los sistemas de conectividad e infraestructuras inteligentes pueden contribuir a la evolución de la movilidad en el futuro.
Convergencia tecnológica y escenarios futuros para la movilidad

Según Pablo Bereciartúa del ITBA, la discusión actual se centra en “cómo hacer que las cosas giren en torno a los intereses de las personas en cuanto a movilidad”. Hasta el siglo XX, las tecnologías han ayudado a las personas, pero esto requirió una adaptación de los individuos a los sistemas creados. El cambio de paradigma de este siglo implicará -contrario a lo que sucedió hasta ahora- que las tecnologías sean las que se subordinen a los individuos, y no viceversa.

Para Bereciartúa, este escenario es únicamente posible a partir de la inteligencia y los modelos de colaboración en el que el transporte público y privado puedan combinarse para mejorar el bienestar de las comunidades urbanas. En este sentido, la movilidad está íntimamente ligada al bienestar y la equidad: los individuos que tienen acceso a medios de movilidad presentan mejores indicadores en la satisfacción de sus necesidades básicas.

El uso de la información es un aspecto clave para mejorar la movilidad en grandes ciudades. La sociedad está atravesando una revolución digital que implican cambios sociales y económicos en el uso de la información. Es en este contexto que emerge el Internet de las cosas, un concepto que posibilita pensar el vínculo entre la movilidad y la inteligencia en la ciudad a través del uso de datos.

Al igual que la perspectiva de Ford, Bereciartúa sostiene que “La solución no es una sola: posiblemente es una matriz”. Y si bien según este experto el futuro de la movilidad todavía no está resuelto, existen grandes oportunidades y varias certezas: “La movilidad del futuro será centrada en las personas y no en la tecnología. Será inteligente y ambientalmente sostenible. Será parte de una realidad multimodal. Esto significa enormes oportunidades, tales como producir fuera de los centros históricos de producción y cerca de la demanda. Es un activo clave, para que las ciudades funcionen y puede ser una importante oportunidad de desarrollo”.

Movilidad Colaborativa

Para Eduardo Gorchs de Siemens, la infraestructura tiene un papel protagónico en el futuro de la movilidad. Actualmente, el avance tecnológico en este aspecto ya incluye sistemas automatizados y electrificados. La eficiencia de estos desarrollos se deben, según Gorchs, a la combinación de tres ejes: la electrificación (por su nivel de eficiencia a nivel energético), la automatización (por su capacidad de brindar seguridad) y el más revolucionario: la digitalización, en tanto permite pensar la movilidad en términos de colaboración.

En el panel moderado por José del Río, Gorchs afirmó: “El mejor sistema va a ser aquél que piense en términos de colaboración entre todos los modos de transporte individuales, colectivos, de personas, de cargas para lograr un sistema más eficiente en su conjunto”. La necesidad de rediseñar el sistema de transporte actual en forma colaborativa responde a la influencia de algunas tendencias. Estas se resumen a la mayor longevidad de la gente, que conlleva a pensar en distintas alternativas de movilidad para cada etapa; la urbanización y la disposición del territorio; y el cambio climático, en el que la movilidad tiene una enorme influencia por ser los medios de transporte uno de los generadores más grandes de CO2.

Para Gorchs, las soluciones a nivel infraestructura podrán tener diversas formas, pero deberán tener una misma característica: estar basadas en modos colaborativos que combinen energía, información y tecnología.

El futuro del Internet de las cosas y la movilidad

“El Internet de las cosas son las cosas en movimiento, generando grandes volúmenes de datos, que interpretándolos y agregándoles inteligencia nos va a poner en un lugar de mucha más eficiencia y cambio en la forma en que nos movemos”. Así definió José Luis Romanutti, de Intel, el concepto que ya es una realidad y se encuentra disponible para mejorar la movilidad en el futuro. El Internet de las cosas servirá para conocer cómo las comunidades se mueven en el mundo y a partir de esto, hacer más eficiente la movilidad en base a la información disponible.

El futuro es aún más prometedor para la implementación de sistemas basados en este concepto. Según Romanutti, “se estima que en 2020 va a haber 50 mil millones de dispositivos conectados. Si lo ponemos en comparación con los habitantes, se dice que por cada habitante del mundo va a haber siete dispositivos conectados e interactuando”. Los aportes que tienen para ofrecer este sistema basado en la interconexión y disponibilidad de información son numerosos, pero uno de los más considerables está en la seguridad. “Hay 1.300.000 personas que mueren al año por accidentes de tránsito. Estudios que Intel realizó dicen que si pudiésemos actuar, basados en lo que está pasando en el entorno, medio segundo antes que un accidente ocurra podríamos cambiar la situación en el 60% de los casos de ese accidente. Pero si lo pudiéramos hacer un segundo antes, estaríamos cerca de evitar el 90% de los casos, o al menos que el impacto sea mucho menor” argumentó Romanutti. Por el momento, el Internet de las cosas y soluciones para integrar diversos sistemas ya se están desarrollando. El verdadero desafío que planteará el futuro en materia de movilidad será cómo hacer que la red de transporte interactúe entre sí y con la ciudad.

Los aportes de Pablo Bereciartúa, Eduardo Gorchs y José Luis Romanutti representan el espíritu innovador que Ford cree necesario para mejorar la movilidad en el futuro, en un ámbito de colaboración entre industrias, gobiernos, ciudadanos y ámbito académico.