Consejos para circular como peatones con seguridad | EduVia (Educación Vial) ::: 17 Años :::

Ver y ser visto , es la principal regla para los peatones. Los peatrones deben estar atentos a los movimientos de los vehículos, asegurándose que los conductores de los mismos los vean y, de ser posible, establecer con ellos un contacto visual permita comprobarlo.

Al circular caminando, hacerlo siempre por la acera/vereda y apartados de la calzada.

En carreteras o vías sin acera, caminar lo más a la izquierda posible, en el sentido opuesto al de los coches para poder ver y ser vistos.

Siempre que se estén transportando las bolsas con las compras, intentar llevarlas del lado opuesto al de la calle

Si se circula acompañado de más personas, hacerlo en fila india, uno detrás del otro.

Evitar caminar escuchando música o con auriculares porque disminuye la atención y no se perciben los ruidos que indiquen que un vehículo se aproxima.

No correr por las calles, ni por las aceras/veredas. El peatón debe estar siempre atento para poder parar en cualquier momento.

Para cruzar la calle con seguridad, los peatones deben obedecer algunas reglas

Cruzar la calle siempre por el cruce peatonal

Caminar por el lado derecho. Si todos caminamos ordenados, el flujo mejora.

Cruzar siempre en línea recta, es el camino más rápido hasta el otro lado de la calle.

Atención: mirar para los dos lados, dos, tres ó más veces, hasta estar seguros de que ningún vehículo se aproxima.

Obedecer la señalización: en las bocacalles en que existen semáforos para peatones, sólo atravesar la calle cuando éstos lo indiquen.

Al descender de un vehículo: salir por el lado de la acera y esperar que se aleje para cruzar.

Nunca cruzar la calle por detrás de colectivos, automóviles, árboles u otros obstáculos que impidan que los conductores lo vean.

Y por último, recordar que al circular por la calle, lo hagamos con un vehículo o caminando, es una ocasión de poner en práctica aquellos valores que permiten establecer una convivencia respetuosa y pacífica entre todos los habitantes del espacio público; recordando también que no solamente somos habitantes sino ciudadanos con derechos pero también con obligaciones. Y que el sentido común nos informa que el derecho propio está limitado por el derecho de los demás.