Estado de los neumáticos y seguridad I | EduVia (Educación Vial) ::: 17 Años :::
Comenzamos hoy con una serie de consejos para los automovilistas, referidos al cuidado de un vital componente del automóvil pero que también hace a la seguridad como son los neumáticos.

Para ello, FATE ha desarrollado un listado de consejos útiles y respuestas a las dudas más frecuentes sobre neumáticos.

En esta primera entrega nos referiremos a la correcta presión de inflado de los neumáticos.

Presión de Inflado

¿Cuál es la presión de aire adecuada para mis neumáticos?

La adecuada presión de inflado es el factor individual más importante para el cuidado de sus neumáticos. El valor indicado en el costado del neumático es el valor máximo de operación determinado por el fabricante del neumático, y no necesariamente es la correcta presión de inflado para su vehículo. Siempre debe utilizarse la presión de inflado recomendada por el fabricante del vehículo. Esta información puede encontrarse:

* En el manual del usuario correspondiente a su vehículo
* Adherida en el lateral de la puerta
* En el compartimiento del motor
* En el interior de la guantera

Tenga en cuenta que la presión puede ser distinta para el eje delantero y trasero, y puede variar según el tipo de carga de operación. Consulte el manual de su vehículo. Atención: no utilice los valores genéricos sugeridos por personal no calificado, por ejemplo en estaciones de servicio. La presión de inflado adecuada NO es un valor intuitivo ni aproximado, y es distinta para cada vehículo. Debe ser exactamente la indicada por el fabricante.

¿Cuándo se mide la presión de inflado?

La presión aumenta cuando los neumáticos se calientan, variando entre 1 y 2 psi («libras») por cada 5ºC de cambio de temperatura. Entonces, siempre verifique la presión de inflado cuando los neumáticos están «fríos». Es decir, habiendo rodado el vehículo no más de uno o dos kilómetros, a relativamente baja velocidad. La correcta presión de inflado debe ser verificada al menos una vez por mes, y siempre antes de un viaje largo o transporte de alguna carga pesada. Otra ventaja de la revisión periódica de presión de inflado es que podrá detectar pequeñas pérdidas y repararlas a tiempo, evitando así situaciones más riesgosas.

Recuerde que un neumático radial puede perder la mitad de su presión de inflado sin modificar su aspecto exterior: no se guíe por las apariencias.

¿Cómo se mide la presión de inflado?

Utilice un medidor de presión (manómetro) de buena calidad. Puede emplear un manómetro manual portátil o un manómetro profesional (gomerías, estaciones de servicio, etc.). Los valores se indican en general en «libras», que corresponden a la unidad inglesa de medida «psi» (libras por pulgada cuadrada). Su equivalente en el sistema decimal, y en el que probablemente estén indicadas las especificaciones de su automóvil, son kilogramos por centímetro cuadrado, también indicada como «bar». Para una equivalencia rápida, puede considerar:

1 bar » 14.5 psi (libras por pulgada cuadrada)

Así, una presión de 2 bar equivale aproximadamente a 29 psi. Asegúrese de que los neumáticos de un mismo eje tengan la misma presión de inflado. Siempre recuerde revisar la presión de inflado de su rueda de auxilio. No olvide colocar nuevamente las tapas de las válvulas, ya que las protegen del polvo y la suciedad.

¿Cuáles son las consecuencias de una inadecuada presión de inflado?

La adecuada presión de inflado asegura el máximo rendimiento kilométrico de su neumático.

Las presiones insuficientes causan:

Aumento en el consumo de combustible
Sobrecalentamiento del neumático
Pérdida de kilometraje
Fatiga prematura en la estructura

Las presiones excesivas causan:

Rupturas en la estructura
Desgaste irregular en los hombros
Pérdida de kilometraje
Incomodidad al conducir
Menor adherencia al suelo
Desgaste irregular y prematuro

La baja presión desgasta anormalmente a la banda de rodamiento, porque solamente se apoyan los bordes sobre el suelo. Además, el neumático se flexiona más y como consecuencia se calienta demasiado. Recuerde: El calor es el peor enemigo de los neumáticos. Cuando el neumático trabaja con la presión y carga recomendadas, presenta un máximo de superficie de apoyo y se reduce el calentamiento.

Para mayores datos: www.fate.com.ar

Héctor O. Losino
Fuente FATE